En un emotivo acto celebrado en la provincia de Caranavi por el 33 aniversario de la Federación Carrasco la Reserva, el Vicepresidente del Estado Plurinacional, Jilata David Choquehuanca, destacó, este sábado, la necesidad de fomentar y apoyar el liderazgo de los jóvenes dentro de las comunidades. El evento contó con la presencia de autoridades locales, dirigentes, educadores y numerosos jóvenes, quienes se reunieron para celebrar y reflexionar sobre el futuro de su comunidad.
“Cuando uno está cumpliendo años, tiene que también reflexionar ¿cómo va a seguir caminando mañana? ¿Qué es lo que va a hacer mañana? ¿Cómo está su situación?” señaló Choquehuanca, instando a los presentes a evaluar su progreso y planificar sus próximos pasos hacia un desarrollo sostenible y justo.
El Vicepresidente expresó su preocupación por los desafíos globales actuales, tales como las crisis climáticas y sanitarias, y cómo estos afectan directamente a las comunidades locales. “Nuestra Pachamama está herida de muerte. Y tenemos que reflexionar cómo cuidamos a nuestros niños, cómo cuidamos nuestros ríos, cómo cuidamos el agua, cómo cuidamos nuestros bosques” comentó, haciendo hincapié en la importancia de la protección ambiental y la gestión de recursos.
Uno de los puntos centrales de su discurso fue el potencial y la responsabilidad de los jóvenes en liderar el cambio dentro de sus comunidades. “Las personas mayores tenemos que ayudar a los jóvenes. Necesitamos hombres y mujeres que se comprometan con su comunidad, con su pueblo y no piensen en ellos mismos,” afirmó, subrayando que los líderes jóvenes deben estar dispuestos a dar su vida por su comunidad.
Choquehuanca también criticó la división y el conflicto inducido por influencias externas que buscan desestabilizar las comunidades. “Somos una sola familia. El racismo, el odio, el individualismo, llegó con el colonialismo, no había antes en nuestra comunidad,” expresó, llamando a superar estas barreras y trabajar unidos por el bien común.
Concluyó el Jilata su intervención con un llamado a la acción para los jóvenes, quienes, con el propósito de convertirse en los nuevos guardianes de los valores y sabidurías ancestrales. “He visto, la ejecutiva es una hermana joven. El ejecutivo es un hermano joven. Tenemos que cuidarlos, tenemos que dar recomendaciones, porque un día tenemos que sentir orgullo de ellos y ellos tienen que trabajar por la comunidad,” motivando a la juventud a adoptar un rol activo y consciente en la gestión de sus tradiciones y el desarrollo de sus comunidades.
Este aniversario no solo fue una celebración, sino también una plataforma para reforzar el compromiso de los jóvenes con los principios del Vivir Bien y promover un liderazgo que respete y valorice la herencia cultural y la sabiduría ancestral.